En la última sesión de la Comisión Permanente del Parlamento, el Diputado Álvaro Viviano del Movimiento Nacional Por La Patria (Partido Nacional) planteó, en la media hora previa, la realidad del complejo habitacional Euskalerría 70.
El diputado dijo que en dicho complejo viven unas 5.000 personas distribuidas en 120 apartamentos en 37 torres de diferentes tipologías. Construido en 1983, presenta problemas de diseño arquitectónico, padeciendo un notorio y avanzado deterioro.
Actualmente “estamos ingresando en una etapa de virtuales riesgos , a partir de desprendimientos de hormigón, corrosión del acero de las estructuras, deterioro de ductos, además de colaterales internos, en la instalación eléctrica y sanitaria”.
Esa situación generó una “demanda civil que los copropietarios inician contra el Banco Hipotecario del Uruguay en el año 2004 logrando probar que efectivamente el daño progresivo al que están sometidas las edificaciones tiene origen en aquellos vicios de construcción detectados tempranamente”.
“Las estimaciones preliminares de costo de rehabilitación de las instalaciones rondaban la suma de US$ 40 millones” y en 2018 comenzó la liquidación de sentencia, trámite que “aún pende de finalizar”.
Desde aquel momento se han dado todas las instancias propias de un juicio: audiencias de precepto, declaración de testigos, informes periciales, ingreso de la Agencia Nacional de Vivienda como tercero coadyuvante, etc.
Casi han pasado 20 años de trámite judicial, tiempo que “habla por sí solo de la dificultad de encontrar una solución final y del empeño puesto por las partes para defender su verdad, incluso en la liquidación de sentencias, a pesar de los fallos a favor del complejo en las instancias previas que eran claros y contundentes”, señaló Viviano.
Por esa razón, se preguntó “¿cuánto valor tendría la posibilidad de buscar por la vía judicial acuerdos intermedios que permitan reparar el daño, realizar las obras y darle un estado de tranquilidad que contribuya a que estas 5.000 personas de una zona carenciada de Montevideo puedan vivir un poco mejor?”
Desde el Estado, “muchas veces gastamos excesivas energías tratando de encontrar planes de edificación para tantos, acá tenemos uno que tiene más de 40 años, que necesita consolidarse y resolver sus problemas”, planteó e instó al Estado a “actuar” e incluso “morigerar el necesario interés de la generalidad de la sociedad con uno en particular que bien merece darle un empujón”.
Nació en Aires Puros.
Tiene tres hermanos menores, que son trillizos, dos varones y una mujer.
Está casado con Laura, tiene tres hijas y dos nietos de 5 y 2 años.
Concurrió a la escuela Estado de Israel, al Liceo 21 y al Liceo Rodó.
Fue boy scout desde los 11 años en el barrio Casavalle.
Trabajó como relojero desde los 16, mientras terminaba preparatorios y empezaba Facultad de Derecho. Atendió el quiosco que tenía su padre en el barrio Reducto, y más tarde dio clases de conducir.
A los 18 años se fue a vivir al barrio Municipal Instrucciones, a un predio de los Scouts, desde donde realizaban diferentes acciones de servicio social.
Comenzó su militancia política previo al plebiscito de 1980. Estudió Derecho y tuvo una activa actuación en la militancia gremial, siendo fundador, delegado y ejecutivo de la ASCEEP, y en ella fundador de la CGU.
Desde el Partido Nacional, fue fundador de la Secretaría de Asuntos Sociales (SAS)
En febrero de 1985, fue electo Director del Partido Nacional por la SAS, en el Directorio que presidió Wilson.
Desde ese año, fue el primer Secretario General de la Juventud de Por la Patria y diputado suplente por la Lista W.
Fundador y primer Director del INJU, y Director Nacional de Correos.
Accedió al Senado por Propuesta Nacional en 1994. Desde 2004 ejerce ininterrumpidamente la actividad parlamentaria, primero como diputado y luego como senador, habiendo apoyado las candidaturas de Jorge Larrañaga.
Hoy se ha propuesto recrear una corriente wilsonista, el Movimiento Nacional Por La Patria, con el objetivo de ensanchar la base del Partido, para ayudarlo a ganar y continuar con los cambios. Dispuesto a asumir los desafíos necesarios.
